Dirección: Calle Portales 7, Logroño, La Rioja
Teléfono: 941241334
Web: www.asadorelportalon.es [flash]
Precio orientativo: 33€
El Portalón es un restaurante de estilo tradicional cuya especialidad son las carnes a la brasa y en particular el chuletón de buey y el cordero asado. Además en estas fechas (del 8 de octubre al 3 de diciembre) celebra las Octavas jornadas del chuletón de buey. Estas jornadas consisten en que todos los jueves, tanto para comer como para cenar, disponen de un menú especial que consta de varios entrantes que cambian cada semana, seguidos del chuletón de buey a la brasa como plato principal. El menú también incluye bebida (una botella de vino por cada dos comensales, de una bodega diferente cada día) y además pan, postre, café y chupito.
Nosotros fuimos ayer y disfrutamos del menú correspondiente.
Empezamos con unos Puerros a la vinagreta que estaban en su punto. Seguimos con la Tosta de foie con puré de manzana, una combinación (foie fresco y manzana) que ya no resulta original, pero es eficaz. Después vino la Careta a la parrilla, unos ricos morritos de cerdo perfectamente asados. Y terminamos los entrantes con un Revuelto de gulas y gambas, elegido por unanimidad como el más flojo de todos.
Entonces llegó el plato principal. Nos sirvieron un Chuletón de buey a la brasa para cada dos personas. Los acompañaron de Guindillones de Tormantos asados a la leña y también de patatas fritas. La carne nos pareció excelente: tierna, sabrosa y asada en su punto. Bien hecha por fuera y roja por dentro. La sirvieron en unos platos de cerámica que mantienen el calor e impiden que se enfríe y además permiten hacer un poco más la carne si se desea. En cuanto a los guindillones, su toque picante los convierte en una alternativa ventajosa a los pimientos.
Para terminar había tres postres a elegir: sorbete de mojito, tiramisú o leche frita. Correctos.
El vino que tocaba esta semana para acompañar era el Inspiración de Valdemar 2005, de Bodegas Valdemar, en Oyón. Un tinto elaborado en un 90% de Tempranillo y un 10% de Graciano. Su etiqueta de vino joven esconde 10 meses de crianza en barricas de roble francés (75%) y americano (25%). De estilo moderno, resulta a mi gusto correcto, aunque le echo en falta algo más de personalidad.
En conclusión, una buena cena, con el chuletón como estrella. Y mejor aún la compañía.
Nosotros fuimos ayer y disfrutamos del menú correspondiente.
Empezamos con unos Puerros a la vinagreta que estaban en su punto. Seguimos con la Tosta de foie con puré de manzana, una combinación (foie fresco y manzana) que ya no resulta original, pero es eficaz. Después vino la Careta a la parrilla, unos ricos morritos de cerdo perfectamente asados. Y terminamos los entrantes con un Revuelto de gulas y gambas, elegido por unanimidad como el más flojo de todos.
Entonces llegó el plato principal. Nos sirvieron un Chuletón de buey a la brasa para cada dos personas. Los acompañaron de Guindillones de Tormantos asados a la leña y también de patatas fritas. La carne nos pareció excelente: tierna, sabrosa y asada en su punto. Bien hecha por fuera y roja por dentro. La sirvieron en unos platos de cerámica que mantienen el calor e impiden que se enfríe y además permiten hacer un poco más la carne si se desea. En cuanto a los guindillones, su toque picante los convierte en una alternativa ventajosa a los pimientos.
Para terminar había tres postres a elegir: sorbete de mojito, tiramisú o leche frita. Correctos.
El vino que tocaba esta semana para acompañar era el Inspiración de Valdemar 2005, de Bodegas Valdemar, en Oyón. Un tinto elaborado en un 90% de Tempranillo y un 10% de Graciano. Su etiqueta de vino joven esconde 10 meses de crianza en barricas de roble francés (75%) y americano (25%). De estilo moderno, resulta a mi gusto correcto, aunque le echo en falta algo más de personalidad.
En conclusión, una buena cena, con el chuletón como estrella. Y mejor aún la compañía.
2 comentarios:
Mm... yo estuve hoy y pedimos cochinillo que estaba fuera de carta.. exquisito. De primero ensalada, croquetas caseras, de balacao y jamón, que se deshacían en la boca y unos choricitos. De postre helado de Brandy con pasas y galleta de cacao, perfecto en cremosidad e intensidad de sabor. El vino va a gustos.. nosotros nos decantamos el Muga reserva que ya lo conocía y que por cierto a 28e la botella sale más barato que en una tienda en Barcelona. Vamos que por 49e por persona que nos ha costado.. realmente pienso repetir cuando vuelva por la zona vv''
Gracias, G82, por compartir tu experiencia. Parece que disfrutasteis de una estupenda comida. Y el vino es todo un clásico de Rioja. Como dices, un sitio para repetir.
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