Ernesto Navas es enólogo de la bodega José L. Ferrer de la denominación de origen Binissalem Mallorca. Aprovechando que pasó unos días por La Rioja no quisimos dejar de preparar una cata con él para tratar de aprender un poco y pasar un buen rato.
Comenzamos con un vino de la República Checa. En concreto de la bodega Baloun, de Velké Pavlovice en la región de Moravia. Se trata del Frankovka (variedad también conocida como Blaufränkisch o Lemberger) del año 2004 con crianza en barrica. A la vista es limpio y de un brillante tono entre cereza y granate e intensidad media. En aromas destacan florales y ahumados. Y en boca es suave y de persistencia corta. En conjunto nos pareció equilibrado y armonioso. Como curiosidad puedo decir que a alguno de los presentes le recordó a un cabernet, salvo por el color.
En segundo lugar catamos el Château Orme Brun Saint-Emilion Grand Cru de 2004. A priori esta clasificación de Grand Cru que hace referencia a la excelente calidad del terreno de cultivo nos hacía tener muy buenas expectativas. Sin embargo nos terminó decepcionando. Visualmente era intenso de un púrpura limpio. Pero al olfato inmediatamente nos recordó al foie-gras. Esto ya nos hizo pensar que o bien necesitaba decantar o simplemente tuvimos mala suerte con esa botella. Y el gusto astringente y amargo, alcohólico, pese a sus no excesivos 12,5 grados, recordando al chocolate. Sensación, la del chocolate amargo, que también obtuvimos en la retro-olfacción. Un vino desequilibrado en suma. Por cierto que se aventuró su composición (ya que la etiqueta era muy parca) de cabernet y merlot, cosa que posteriormente he confirmado en su web: 70% merlot, 10% cabernet sauvignon y 20% cabernet franc.
Y para finalizar la cata enfrentamos a Ernesto con uno de los vinos de José L. Ferrer: el Veritas Dolç 2006. Es éste un vino blanco dulce elaborado a partir de la variedad Moscatel de grano menudo. Es de aspecto brillante y color amarillo paja. En su intenso aroma se reconoce inmediatamente el propio de la variedad. Y su sabor es dulce, suave y delicado. En conclusión, un vino muy agradable de beber. Recibió el Baco de Oro 2006 en la XXI Cata Concurso Nacional de Vinos Jóvenes de la Unión Española de Catadores. Nuestra enhorabuena al autor y a la propiedad por este merecido premio.
Comenzamos con un vino de la República Checa. En concreto de la bodega Baloun, de Velké Pavlovice en la región de Moravia. Se trata del Frankovka (variedad también conocida como Blaufränkisch o Lemberger) del año 2004 con crianza en barrica. A la vista es limpio y de un brillante tono entre cereza y granate e intensidad media. En aromas destacan florales y ahumados. Y en boca es suave y de persistencia corta. En conjunto nos pareció equilibrado y armonioso. Como curiosidad puedo decir que a alguno de los presentes le recordó a un cabernet, salvo por el color.
En segundo lugar catamos el Château Orme Brun Saint-Emilion Grand Cru de 2004. A priori esta clasificación de Grand Cru que hace referencia a la excelente calidad del terreno de cultivo nos hacía tener muy buenas expectativas. Sin embargo nos terminó decepcionando. Visualmente era intenso de un púrpura limpio. Pero al olfato inmediatamente nos recordó al foie-gras. Esto ya nos hizo pensar que o bien necesitaba decantar o simplemente tuvimos mala suerte con esa botella. Y el gusto astringente y amargo, alcohólico, pese a sus no excesivos 12,5 grados, recordando al chocolate. Sensación, la del chocolate amargo, que también obtuvimos en la retro-olfacción. Un vino desequilibrado en suma. Por cierto que se aventuró su composición (ya que la etiqueta era muy parca) de cabernet y merlot, cosa que posteriormente he confirmado en su web: 70% merlot, 10% cabernet sauvignon y 20% cabernet franc.
Y para finalizar la cata enfrentamos a Ernesto con uno de los vinos de José L. Ferrer: el Veritas Dolç 2006. Es éste un vino blanco dulce elaborado a partir de la variedad Moscatel de grano menudo. Es de aspecto brillante y color amarillo paja. En su intenso aroma se reconoce inmediatamente el propio de la variedad. Y su sabor es dulce, suave y delicado. En conclusión, un vino muy agradable de beber. Recibió el Baco de Oro 2006 en la XXI Cata Concurso Nacional de Vinos Jóvenes de la Unión Española de Catadores. Nuestra enhorabuena al autor y a la propiedad por este merecido premio.
1 comentario:
Excelente resumen de una cata estupenda. Tengo que agradecer, de nuevo, al enólogo su amabilidad y a los anfitriones su invitación. Dicho queda.
Publicar un comentario