lunes, 13 de marzo de 2006

Reflexiones en el primer aniversario

Este mes cumplimos 1 añito como B-logia. Desde aquella comida inaugural en el Akelarre ha llovido mucho (bueno, llover llover no ha llovido, en fin...ya me entendéis). Hace unos días me preguntaba un amigo que qué es la Logia. Le respondí que somos un pequeño grupo de viejos amigos a los que nos gusta mucho comer bien y hablar de lo bien que comemos. Luego, pensándolo, me di cuenta de que me había quedado corta en la explicación y que además no se ajustaba a la realidad. Ojeando las entradas de este primer año de vida de B-logia, me di cuenta en primer lugar de que no somos un "pequeño grupo de viejos amigos". Ni estamos todos los que éramos, ni afortunadamente somos sólo aquellos que fuimos. Quizás hubiera sido más preciso decir que la Logia fue inicialmente un feliz reencuentro de unos cuantos viejos amigos que, sin pretenderlo, volvieron a encontrar un nexo común de intereses y afinidades. Después de un montón de años sin vernos, un buen día compartimos unos vinos y una conferencia, y fue como un truco de magia, un chasquido de dedos y zas...como si no hubiera pasado el tiempo, incluso mejor... Recuerdo que fue como volver a casa. Me asombré de lo a gusto que me encontraba, de lo fácil que era reírse con ganas, agradecí la conversación inteligente, las ironías, los dobles sentidos, los juegos de palabras en los que algunos sois expertos, y otras cosas aún mejores que me reservo para contároslas en próximos aniversarios (tampoco es cuestión de pasarse!!!).

Pero la Logia ha ido mucho más allá. Es curioso cómo ha cambiado a lo largo de este año hasta convertirse en un grupo abierto, con un nucleo duro permanente rodeado de una enorme periferia que, gracias a nuestro "incombustible" Guille, siempre se encuentra en permanente expansión. Para muestra un botón:


La Logia es también un poquito italiana, con Anna, a la que tenemos que agradecer su guía por Nápoles, sus consejos en materia de vinos italianos, y sus ascensores mágicos ;-)

La Logia es mucho Caius Apicius (que no falte!!!). La Logia es lecturas, viajes... Es conferencias, catas, planes, cines... Es música gracias a Pepe, "the provider". Es helado de turrón de Agustina. Es futura alta cocina...que para eso tenemos un chef en ciernes. Es, quizás lo más importante, libertad para poder no estar y, sin embargo, seguir estando... Es un huequito en el mundo que siempre está ahí. Es un lujo.

2 comentarios:

Javier dijo...

"Recuerdo que fue como volver a casa". Me ha gustado esa expresión; al final todo ser resume ahí: que todos nos sintamos como en casa, con confianza y un buen caldo de la tierra.

Ese es el secreto de la logia: que, al contrario de lo que sucedía con sus referentes históricos, es un grupo, o un lugar, o un tiempo, totalmente abierto. No tiene más normas que las que se nos ocurren en el momento y la única condición es que nadie se sienta a disgusto.

¡ale, a ponernos sentimentales! ;-)

"Venimos del vino y hacia el vino vamos. ¿En qué reino, en qué siglo, bajo que silenciosa conjunción de los astros, en qué secreto día que el mármol no ha salvado, surgió la valerosa y singular idea de inventar la alegría?" Lubio Cardozo

Guillermo dijo...

Sólo puedo añadir:
¡Feliz aniversario!
Y que cumplamos muchos más.