En plena Rioja Alavesa, en Elciego, las bodegas Muriel elaboran una línea de vinos reconocidos internacionalmente por su excelente relación calidad-precio. Sus Barón de Barbón han recibido la distinción de Great Value Red Wine of the Year de la International Wine Challenge en sus ediciones del 2003 y 2004. Hoy hemos probado un Barón de Barbón Crianza 2001 que hace honor a esta distinción .
Se trata de un vino armonioso, sin demasiada sensación de alcohol en boca ni en nariz a pesar de sus 13.5%. Resulta visualmente muy atractivo por su tono prototípicamente rojo picota intenso. Es rico en aromas tanto primarios como secundarios. Los toques tostados, avainillados y especiados que le ha conferido su crianza de 18 meses en barricas de roble americano y francés están perfectamente equilibrados con otros provenientes de frutas rojas maduras. Su ácidez es algo más elevada de lo que es normal en los vinos de la Rioja Alavesa, haciéndolo más liviano y más fresco que éstos.
Resulta, en definitiva, un vino muy agradable y que combina muy bien con la comida, manteniendo su personalidad durante la misma al tiempo que gana en pequeños matices.
Y además esta botella ha sido un regalo de mi sobrina de 7 años, que se ha dejado en el detalle 5 eurazos de sus menguados ahorros, lo que lo convierte en el mejor vino del mundo mundial para mí a partir de ahora. Definitivamente, el disfrute del vino es algo muy subjetivo... ;-)
Se trata de un vino armonioso, sin demasiada sensación de alcohol en boca ni en nariz a pesar de sus 13.5%. Resulta visualmente muy atractivo por su tono prototípicamente rojo picota intenso. Es rico en aromas tanto primarios como secundarios. Los toques tostados, avainillados y especiados que le ha conferido su crianza de 18 meses en barricas de roble americano y francés están perfectamente equilibrados con otros provenientes de frutas rojas maduras. Su ácidez es algo más elevada de lo que es normal en los vinos de la Rioja Alavesa, haciéndolo más liviano y más fresco que éstos.
Resulta, en definitiva, un vino muy agradable y que combina muy bien con la comida, manteniendo su personalidad durante la misma al tiempo que gana en pequeños matices.
Y además esta botella ha sido un regalo de mi sobrina de 7 años, que se ha dejado en el detalle 5 eurazos de sus menguados ahorros, lo que lo convierte en el mejor vino del mundo mundial para mí a partir de ahora. Definitivamente, el disfrute del vino es algo muy subjetivo... ;-)
2 comentarios:
¡Qué bien aprovecha la paga! A ver si otras sobrinas van copiando la idea... :-)
estoy tomando uno ahora mismo, realmente muy bueno....
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