martes, 28 de julio de 2009

Bernard Speciální Černé Pivo

De nuevo tengo la suerte de probar una estupenda cerveza checa. Y de nuevo el proveedor es Fer, a quien agradezco efusivamente el regalo.
Se trata de la Bernard Speciální Černé Pivo, o cerveza negra especial de la cervecera Bernard, de Humpolec.
Es una cerveza negra, de 5,1% de grado alcohólico que se presenta en un botellín de medio litro. Se elabora con cinco tipos de malta y no es pasteurizada, sino que se filtra para eliminar microorganismos sin alterar su sabor.
Al servirla presenta una densa y abundante espuma. Intenso aroma a regaliz y algo de frutos secos (avellanas). En boca también se encuentra el regaliz y resulta amarga, intensa y con cuerpo, además de muy refrescante. Deja una larga y agradable persistencia.
Para mi gusto una excelente cerveza.

domingo, 26 de julio de 2009

Cata de Burdeos

Ayer aprovechamos una agradable reunión con familiares y amigos para cenar y de paso catar unos cuantos tintos de Burdeos. Eran vinos de distintos lugares pero con el rasgo común de ser todos ellos elaborados por Bernard Magrez, de quien ya comentamos hace poco otro vino.
Comenzamos por el Châteu Bois Chantant Bordeaux 2006. Elaborado con un 74% de merlot, 18% de cabernet sauvignon y 8% de cabernet franc procedentes de viñedos de 25 años. Declara un 13% de alcohol. En su etiqueta no indica si ha sido envejecido y nos surge la duda al observarlo de si tendrá algo de madera o si su color evolucionado se puede deber a una cierta oxidación por el paso del tiempo. En su web aclaramos la duda: el 50% del vino ha sido envejecido durante 10 meses en barricas, de las cuales un 10% eran nuevas de roble francés. En todo caso nos resulta muy alcohólico en nariz y también cálido en boca. Un vino ligero, apenas correcto.
Seguimos con un Château Bois Pertuis Bordeaux 2006. En este caso lleva un 68% de merlot, 22% de cabernet sauvignon y 10% de cabernet franc de viñedos de 25 años. Grado alcohólico un 13%. La etiqueta indica además que el vino ha sido envejecido tradicionalmente. De nuevo la web aclara: 8 meses en barrica de roble francés. En este caso el alcohol está mejor integrado. En boca descubrimos un vino algo astringente pero equilibrado, con estructura.
El siguiente es un Château Tour Blanche Médoc 2005 Cru Bourgeois. 58% merlot, 29% cabernet sauvignon, 13% cabernet franc de viñedos de 35 años. Tiene un 14% de alcohol. Envejecido 19 meses en roble francés. A la vista presenta buen color, mejor conservado que los anteriores. También se muestra más agradable en aromas, aunque hay quien percibe algo de pimiento. Y en boca se muestra equilibrado, con buenos taninos y bien integrado.
Continuamos con un Château Fombrauge Grand Cru Saint-Emilion 2006. 77% merlot, 14% cabernet franc, 9% cabernet sauvignon. 14% de grado alcohólico. Envejecido 18 meses en barrica de roble francés. Intenso color a la vista. En nariz hay presentes taninos, especias del roble francés, así como algo de reducción (aroma a foie). En boca también están presentes los taninos y también tiene una buena acidez. Hay comentarios sobre que es un vino "estilo Parker": según la web tiene una puntuación de 90-93.
Finalizamos con un Château Latour Carnet Grand Cru Haut-Médoc 2004. Elaborado con un 50% de merlot, 40% de cabernet sauvignon, 7% de cabernet franc y 3% de petit verdot. Tiene un 13% de alcohol. Envejecido 18 meses en barricas de roble francés. Buen color a la vista. Aromas de roble, taninos, resulta aromático. También encontramos un poco de reducción así como algo de chocolate. En boca resulta clásico, sin excesos, algo amargo, algo ácido pero muy equilibrado.
En conjunto nos queda la sensación de haber probado unos vinos en general buenos y algunos, los últimos, realmente muy estimables. Y además hemos pasado un buen rato, que era de lo que se trataba. Muchas gracias a todos los que vinisteis.

miércoles, 22 de julio de 2009

Alicia Rojas y Viñedos de Aldeanueva - Vinobus 2009

La iniciativa vinobús ha crecido este año y plantea siete nuevos viajes. Animados por la buena experiencia del año pasado, compramos nuestros billetes y nos embarcamos nuevamente, este vez rumbo a la Rioja Baja, en un viaje denominado "El vino y la herencia romana en La Rioja".

El autobús ha desmejorado algo respecto al del año pasado (que, sin embargo, sigue saliendo en las fotos), pero la idea sigue siendo la misma: visitar dos bodegas y admirar el paisaje riojano. Esto último se concreta en una visita "cultural" que, me temo, solo sirve para perder el tiempo. No podemos olvidar que el objetivo central del viaje es visitar bodegas. Para admirar los muchos tesoros de La Rioja hay mejores opciones.

Pero vamos a lo bueno. Para empezar, la herencia romana es una excusa: salvo unas pocas explicaciones de la guía, brillará por su ausencia. Nadie la echó de menos: Alicia Rojas y las Bodegas Viñedos de Aldeanueva eran las estrellas de la jornada y nada las eclipsó.

Bodegas Alicia Rojas se encuentra en Ausejo, en una finca ligeramente apartada del pueblo que ocupa unas ochocientas hectáreas, y sube desde los 300 metros de altura del pueblo hasta los 750 del monte Plana Alta o Collado de la Estrella. La viña es importante en la finca, lógicamente, pero también tienen almendros, olivos (elaboran aceite) y cereal. En las laderas boscosas del monte hay caza mayor y menor. Todo esto nos lo cuenta la propia Alicia Rojas, que es nuestra anfitriona, con sencillez y un justificado orgullo por lo que ella y su familia han construido.

La nave de elaboración, de moderno diseño, se encuentra algo alejada del edificio principal, lo que permite llegar dando un pequeño paseo junto a las viñas, que tienen ya pequeños frutos verdes. Pronto comenzará el envero, el cambio de color, y las uvas se tornarán negras, las tintas, y doradas, las blancas. En la nave, nada nuevo: los grandes depósitos de metal, un laboratorio, la prensa, las tolvas, todo lo que podemos encontrar en una nave de elaboración. El toque de Alicia Rojas mezcla la adopción de métodos modernos con el respeto por la tradición y el gusto por los Riojas clásicos.

La visita concluye en el edificio principal de la bodega, donde nos han preparado una cata de tres vinos: el blanco semi-dulce, el blanco seco y un tinto de crianza. Los tres excelentes. Como buena anfitriona, nos puso algo de picar para acompañar al vino: un señor almuerzo con pan, paté, tortilla de patatas y pimientos asados. Todo riquisimo, aunque debemos destacar necesariamente el estupendo maridaje del blanco semi-dulce con el paté. Un diez para la anfitriona y otro para sus vinos.

Tras despedirnos de Alicia Rojas, proseguimos la ruta hacia Calahorra, cuya catedral vamos a visitar. Posteriormente, continuaremos unos kilómetros más por la Nacional 232 hasta llegar a Aldeanueva de Ebro, donde nos esperan en la Bodega Cooperativa, hoy denominada Viñedos de Aldeanueva.

Tal como nos dice Javier, nuestro guía, si Alicia Rojas es un ejemplo de bodega familiar, Viñedos de Aldeanueva es todo lo contrario, una de las bodegas más grandes de Rioja y la mayor de sus Cooperativas. Todas sus cifras son elocuentes: cuatro bodegas, dos de ellas de elaboración con una capacidad de 4,5 y 8,5 millones de litros; dos bodegas subterráneas de cemento de los años 60, seis tolvas de recepción, tres naves de crianza con aproximadamente 15.000 barricas, tres líneas de embotellados, dos de ellas con una capacidad conjunta de 18.000 botellas/hora y unas ventas de 13 millones de botellas.

Las viñas se extienden desde la ribera del río Ebro a las altas laderas del monte Yerga, lo que hace que la vendimia se alargue más de un mes. El suelo, la altitud variable, y un clima caracterizado por muchas horas de sol con baja pluviometría, producen una uva de calidad, intenso color y graduación media-alta.

Nuestro amable guía nos muestra las viejas bodegas de cemento, los modernos depósitos de acero y la espectacular sala de barricas. Junto a ella, una maquina para limpiar barricas le da pie a contarnos como el viejo proceso de limpieza de las barricas ha sido automatizado para garantizar la máxima pureza del vino y su homogeneidad. Aquí se produce el momento más curioso de la jornada pues, por primera vez, escucho a un bodeguero admitir sin ambages que el sulfuroso es el conservante del vino y que sin él no habría forma de elaborar vinos de larga duración. No es un secreto; cualquiera que conozca la elaboración del vino sabe que el azufre se utiliza para desinfección y conservación, pero si parece ser algo "incorrecto" o "anticomercial".

Por último nos dirigimos a la sala de catas, que está situada junto a la entrada de la bodega. En este momento apreciamos el verdadero tamaño de la bodega, pues volver al punto de salida nos cuesta mucho más tiempo del que nos hubiéramos imaginado. La amenidad de la charla nos ha hecho perder por completo la noción del tiempo. Dos excelentes tintos "Azabache", uno del año y otro de crianza, ponen fin a nuestra excursión.

lunes, 20 de julio de 2009

Riojano joven y fresco 2009

De nuevo se está celebrando esta fiesta del vino joven y de crianza que ya comentamos el año pasado. En esta ocasión, como novedad, comenzó el día 9 de julio jueves, pero en Oviedo. Si algún lector de este blog tuvo ocasión de estar allí agradeceríamos cualquier impresión que nos quisiera dejar sobre ello en los comentarios.
El pasado jueves 16 de julio ya volvió a su ubicación habitual del entorno de la calle Bretón de los Herreros de Logroño. También se celebrará en este mismo lugar el próximo jueves 23 y el también jueves 6 de agosto.
Prevenidos por lo sucedido el año pasado decidimos llegar pronto para evitar aglomeraciones, al menos mientras fuese posible. Así no tuvimos problema en hacernos con una copa y los tickets de cata, que este año no se venden por separado. Completaban el kit un cuaderno de cata y un lapicero, buena idea aunque difíciles de usar si ya tienes una copa en una mano.
Otra novedad es que la organización había dispuesto planos de situación de las mesas de las distintas bodegas presentes en el acto. Así que tomamos unos momentos para ubicarnos y nos dirigimos a visitar lo que nos pareció más interesante.
Comenzamos por la bodega San Prudencio [flash]. Aquí probamos su Envite Seducción, un original blanco semidulce que, según nos explicaron, se elabora con viura y malvasía deteniendo la fermentación en el momento adecuado. Con su agradable dulzor y su 10,5% de alcohol es un vino muy fácil de beber. También probamos su Envite crianza de 2006, servido de una espectacular botella de 5 litros, que no es ni con mucho la mayor de las que disponen en esta bodega. Intenso en aromas y equilibrado en boca es sin duda un buen tinto.
En segundo lugar nos dirigimos a Viña Ijalba [flash]. Esta bodega dispone de vinos monovarietales de todas las variedades de Rioja y en los últimos años ha ampliado su gama. Nos dejamos aconsejar y empezamos probando su Maturana Tinta de 2005. Es un vino de gran fuerza, muy amargo y extraordinariamente astringente. También probamos el Graciano de 2005. Intenso, con cuerpo, fino y bastante astringente (aunque lejos del anterior). Nos dijeron que acompañaría muy bien carnes a la brasa y yo estuve de acuerdo.
A partir de aquí visitamos alguna bodega más pero la gran afluencia de gente hacía difícil desplazarse y catar los vinos en condiciones. Tampoco los expositores estaban en condiciones de dar muchas explicaciones y en algún caso hasta se comportaban con cierta brusquedad. Así que sin nada más que reseñar nos dirigimos a la cercana calle Laurel para finalizar la jornada con unos buenos pinchos.
Y el próximo jueves habrá más.

domingo, 19 de julio de 2009

Mar Cantábrico

Siempre me ha gustado el mar Cantábrico. Con sus fuertes olas e intensas mareas, hay que tener cuidado para nadar en él. Pero la experiencia es distinta a la de cualquier otro lugar.
Ahora en verano la temperatura del agua es ideal. Se mantiene fresca con relación al ambiente sin llegar a estar fría y es perfecta para librarse del calor.
Aquí lo tenemos en acción en la bonita playa de Ereaga, Algorta.

sábado, 18 de julio de 2009

Restaurante Cubita

El restaurante Cubita aprovecha el edificio de un molino del año 1720. Se encuentra en Guecho (Vizcaya) en una zona elevada, junto al mar y con unas impresionantes vistas sobre la playa de Arrigunaga. Preparan comida tradicional y disponen de una amplia carta de vinos.
He comenzado tomando de primero unas Habas al Caserío. Acompañadas de un poquito de chorizo estaban sabrosas y sobre todo muy tiernas.De segundo quería tomar pescado. Me he dejado aconsejar y he pedido Merluza con Chipirones. En realidad dos platos en uno. Por un lado la merluza simplemente rebozada, resaltando la bondad de la materia prima. Y por otro lado unos chipirones en su tinta estupendos.Para postre no me he podido resistir a probar el Pastel Ruso, un dulce que me encanta.En cuanto a la bebida, he ido sobre seguro pidiendo un Viña Alberdi Selección Especial 2001. Un vino de La Rioja Alta de lo más tradicional: fino y redondo en boca.
Sentado en una mesa en el porche del restaurante he podido disfrutar en suma de una buena comida con unas vistas excepcionales al mar Cantábrico.

miércoles, 15 de julio de 2009

Le Gaslonde, Camembert de Normandie

El término Camembert define de manera genérica un tipo de queso de pasta blanda que hoy día se fabrica en muchos lugares del mundo. Sin embargo, Camembert de Normandie es una denominación de origen que protege los quesos camembert que se elaboran de forma artesanal y con leche cruda de vaca, exclusivamente en esta región de Francia, de donde son originarios.
La fabricación industrial es la explicación de que la mayoría de los quesos camembert que se encuentran habitualmente en tiendas y supermercados sean un insípido reflejo de los que yo recordaba haber comido hace años. Además, el tiempo que pasan en la cadena de distribución hace que para cuando llegan a casa estén secos en lugar de cremosos por dentro.
Así que otro de mis objetivos en París era conseguir un verdadero camembert. Y desde luego que este Le Gaslonde, que elaboran en la Fromagerie du Val d'Ay lo es.
En primer lugar por su olor. A pesar de que me lo envolvieron especialmente para viajar, con varias capas de plástico y dos bolsas, su penetrante olor característico terminó impregnando mi equipaje. Y después, en casa, siguió destacando en la nevera.
Pero al abrirlo era exactamente como debía ser: de textura cremosa y delicioso e intenso sabor. Todo un deleite para el paladar.

Café Bar, Bar "El Dorado"

En la calle Portales 81 de Logroño, "El Dorado" nos acoge después de una dura ruta de pinchos o al final de una jornada cualquiera. Tiene una buena carta de cervezas, cuatro de ellas de barril. Como somos de costumbres fijas, casi siempre cae una caña de Franziskaner, muy bien tirada en tres tiempos, como atestiguan las fotografías. De los grifos también manan Primus, Kwak y Kapitel. El local está decorado con motivos indios (de indígenas americanos) y suele tener buena música, aunque un poco alta. En verano tiene terraza. Su última innovación, wifi.



martes, 14 de julio de 2009

Wen Zhou Mei Si Cheng



Situado frente a la Aljafería, el restaurante Wen Zhou Mei Si Cheng puede presumir de ser uno de los preferidos entre la propia comunidad china de Zaragoza. Se trata de un local sin ninguna pretensión, humilde, pero con un personal extremadamente amable y un menú que incluye platos de la cocina china no adaptados al gusto o las expectativas occidentales. La carta está dividida en dos partes, una de ellas escrita exclusivamente en caracteres chinos y otra traducida al castellano. Se trata de platos diferentes en cada caso y es un buen ejemplo de lo que en lingüística se denomina "el uso el lenguaje como escudo cultural", ya que quien no sea capaz de leer los caracteres chinos, se verá privado de la posibilidad de probar las especialidades más auténticas. Afortunadamente, este es un buen sitio para dejarse aconsejar por su dueño y probar platos cuyos nombres nos son desconocidos. El Wan-tun es delicioso. Los rollitos de primavera no tienen nada que ver con los vastos rollazos habituales en los restaurantes chinos para occidentales. Las verduras en tempura con salsa de soja están riquísimas, al igual que el pan chino. Y de postre, nada de lichis, platano flambeado o flan con nata y nueces. Uno no puede irse del Wen Zhou Mei Si Cheng sin probar los canutillos rellenos de yuca y sellados con semillas de sésamo.

lunes, 13 de julio de 2009

Foie Gras de Cannard Entier aux Truffes

Este es un pequeño frasco de foie que se coló en mi equipaje para el viaje de vuelta desde París. Lo elabora Maison Pébeyre, que es todo un nombre en el mundo de la trufa. Fundada en Quercy en 1897, actualmente suministra este sabroso hongo a los mejores cocineros de Francia.
Un buen foie era una de las cosas que más me apetecía buscar en París. Éste lo es y además el añadido de una trufa de calidad consigue potenciar aún más su sabor.
Estaba delicioso, sobre todo cuando lo acompañamos con un buen vino, como por ejemplo, el malvasía semidulce de Alicia Rojas. Excelente combinación.

domingo, 12 de julio de 2009

Terres Dorées Bourgogne Pinot Noir 2007

Jean-Paul Brun es el bodeguero que se encuentra detrás de este vino de Borgoña. Su idea es elaborar vinos de forma natural, respetando las tradiciones. Así este Pinot Noir ha fermentado únicamente con las levaduras presentes en las propias uvas, ha sido clarificado con sílice y contiene sólo una pequeña cantidad de sulfitos. Por tanto es importante conservarlo en buenas condiciones y en todo caso beberlo pronto. Su graduación alcohólica es del 12%.
A la vista presenta un bonito color fresa de baja intensidad muy propio de la variedad.
En nariz le encontramos aromas florales (violetas).
Y en boca resulta fresco, ligero, con buena acidez y rápida transición.
Un vino correcto, muy agradable y fácil de beber.

sábado, 11 de julio de 2009

Mythos XII 2008

Tenemos la suerte de que llegue a nuestras manos esta botella que podríamos calificar de experimental. Ni más ni menos que el vino elaborado por los alumnos de la última promoción de Enología de la Universidad de La Rioja.
Se trata de un tinto joven y en su etiqueta declara un 12,5% de grado alcohólico. Además sabemos que el origen de la uva está en San Vicente de la Sonsierra aunque, lógicamente, este vino no lleve contraetiqueta alguna.
A copa parada muestra una expresivedad media. Agradece airearse.
En color es un vino con tonos violáceos, de capa media alta.
Nariz compleja. Destacan frutos rojos (mora) y regaliz que indican base de tempranillo. Alcohol punzante.
Es ácido y de persistencia media baja con agradable transición en boca.
En conjunto un vino correcto y agradable.

lunes, 6 de julio de 2009

Último día en París

Ayer fue mi último día en París por esta vez. Por suerte mi avión salía por la tarde y todavía pude disfrutar de una mañana más en la capital de Francia.
Tiempo suficiente para visitar la iglesia de la Madeleine, templo neoclásico de hermosas proporciones, y el Museo Nacional de la Edad Media y de las Termas de Cluny, donde se pueden admirar restos de unas termas romanas así como multitud de objetos medievales.
En definitiva han sido unos días de mucho callejear encontrando maravillas a cada paso. He descubierto una ciudad magnífica y muy cosmopolita de la que todavía me queda mucho más por conocer.
Por cierto, gracias a los que habéis seguido el blog estos días y muy especialmente a los que además habéis dejado comentarios: me ha encantado leerlos y me habéis animado a seguir escribiendo.

sábado, 4 de julio de 2009

Wally Le Saharien

En París se encuentran gran número de restaurantes de cocina de otros países. En particular hay muchos de cocina norteafricana debido a su historia y a su actual relación con los países de la zona. Y esa es una oportunidad que no quería dejar pasar. Por eso hoy he visitado Wally Le Saharien.

Está situado en la calle Rodier, entre la zona de Opéra y Montmartre y su decoración es totalmente adecuada a su comida.

Se puede comer a la carta, pero como tienen un menú degustación, no me lo he pensado mucho. Lo primero ha sido una Harira, una crema fría de verduras de excelente sabor. En segundo lugar la Pastilla façon Traditionnelle, una especie de empanadilla en la que se contraponía el relleno salado a su dulce cobertura de azúcar. Lo siguiente ha sido las Sardines Farcies, es decir, sardinas rellenas, que llevaban un acompañamiento especiado delicioso. Como plato principal el Couscous Saharien, junto a una costilla de cordero y una salsa picante. De postre la Delice Saharien, una especie de bizcocho muy dulce con una crema de naranja que estaba riquísimo.

En general platos muy conseguidos, bien preparados, bien presentados y de aromas y sabor intensos, gracias a las especias empleadas en su elaboración.

Junto al postre también he podido disfrutar de un extraordinario té a la menta.

Para beber he tomado un vino de Argelia: Chateau Mansourah 2006, de la denominación de origen Coteaux de Tlemcen. Un tinto de color intenso, aromas intensos a fruta madura y equilibrado en sabores aunque con cierto exceso de alcohol en boca. Apostaría a que está elaborado a base de Cabernet Sauvignon y que ronda el 14% de graduación. Correcto, pero lamentablemente indistinguible de vinos similares de cualquier otro lugar del mundo. Cosas que tiene la modernidad.

El resto del día he seguido con mis visitas parisinas: el Musée d'Orsay, donde he podido admirar algunas de las mejores obras del impresionismo, el espectacular edificio de l'Opéra y la zona de La Défense, con sus colosales rascacielos.

viernes, 3 de julio de 2009

Versalles

Hoy me he desplazado (un breve trayecto en cercanías) hasta Versalles, lugar donde se encuentra el palacio que fue residencia de los reyes de Francia. Todo allí es impresionante. Cada salón más lujoso que el anterior. Y los jardines son verdaderamente inmensos.

Por la tarde, ya de nuevo en París he subido hasta la basílica de Sacré Coeur en Montmartre, desde donde se disfrutan unas vistas privilegiadas de toda la ciudad.

Había además mucha gente y un ambiente extraordinario a la espera de la puesta del sol sobre la ciudad. También había unos músicos que, con más esfuerzo que calidad, interpretaban canciones muy conocidas. Por ejemplo esta particular versión de Billie Jean, del recientemente fallecido Michael Jackson.

Por cierto, que también ayer en el Campo de Marte había mucha gente a la espera de la puesta del sol y los juegos de luces de la Torre Eiffel.

Ya de noche, bajando de Montmartre, he parado en un bar de vinos, me he sentado en su terraza y he pedido un tinto de Borgoña. Me han puesto una copa de un vino de bonito color rubí, de media intensidad (nada de modernidades), con aromas a frutas (ciruela) y afrutado aunque algo ácido en boca. Su persistencia era larga y agradable. No le echo más allá de 11,5% o 12% de alcohol. Muy adecuado para paladearlo mientras recordaba lo visto durante el día.

jueves, 2 de julio de 2009

Au Pied de Cochon

En pleno centro de París, a poca distancia del Louvre, se encuentra el restaurante Au Pied de Cochon (se puede reservar mesa desde su web). Ocupa un edificio de varios pisos y hoy además, como hacía buen tiempo también tenían terraza. A mi me han sentado en una mesa dentro del comedor pero en la zona en que no había pared con la terraza, con lo que estaba a cubierto y a la vez disfrutando del aire fresco y de las vistas del jardín que hay delante.

Como entrante he elegido el Millefeuille de Tomates et Chèvre aux Raisins de Corinthe, una rica combinación de queso y tomate fresco. También había sopa de cebolla, pero al final (y pese a la petición popular :-) no me he decidido a pedirla. Para plato principal he ido directo a la especialidad de la casa: Le Fameaux Pied de Cochon Grillé Béarnaise. Pura grasa y puro sabor. Un plato delicioso perfectamente elaborado y que da merecida fama al sitio. Sin duda no es algo de lo que se deba abusar, pero merece la pena comerlo alguna vez.

Para postre he aprovechado que durante el verano tienen lo que llaman el Festival Rouge para pedir un plato “rojo”. Se trata de la Transparence de Fruits Rouges, explicado como Mousse Fromage Blanc. Fresas y nata sobre una deliciosa mousse de queso.

El vino ha sido un tinto de Burdeos: Chateau la Roche Mangot de 2002. De gran calidad, equilibrado, con buenos aromas y larga persistencia en boca, ha acompañado muy bien al cochon. Por cierto, que pese a tomar sólo una copa me han sacado la botella, la han abierto delante de mi y me han dado a probar el vino. Sólo cuando he dado mi conformidad me han llenado la copa. Todo un detalle de buen trato, que se suma a lo que ha sido la norma en todo momento.

Y para terminar por hoy os dejo con unas fotos de otras cosillas que he visto por París.

miércoles, 1 de julio de 2009

París

Estoy en París. Llegaba hacia la hora de comer y había bullicio en las calles. Locales de todo tipo llenos de gente, muchos en terrazas, disfrutando de gran variedad de comidas distintas.

Para cuando yo he salido del hotel la cosa ya estaba más tranquila y había sitio en todas partes. Como tenía hambre no he buscado mucho: de los primeros restaurantes que he visto me ha llamado la atención una crepería y allí he comido.

Me he encontrado con un lugar extraordinario, de trato familiar y cercano, en el que la gente del barrio se asoma para saludar cuando pasa por delante.

Y la comida también me ha gustado. He elegido un crepe denominado Parisien, relleno de ratatouille que estaba delicioso.

Las opciones en vinos eran muy escuetas: Burdeos (sin más detalles), sauvignon blanc (también sin más detalles), otro que no recuerdo y un rosado de la Provenza. Dado que llegaba acalorado me ha apetecido este último y ha sido un acierto. Fresco y agradable, ha acompañado perfectamente la comida.

Para colmo al terminar he pedido café y me han puesto un expreso negro, intenso de sabor y nada ácido que me ha sentado de maravilla.

Ya por la tarde he empezado a visitar esta ciudad tan interesante. He comenzado por la Sainte Chapelle, una preciosa iglesita que se encuentra dentro del Palacio de Justicia. Después he pasado por Notre Dame. Y he terminado visitando el Louvre, aprovechando que hoy tenía horario "nocturno" a partir de las 6 de la tarde. Ha sido una gozada ver en la realidad obras maestras de todos los tiempos que sólo había visto en imagen: la Mona Lisa, la Victoria de Samotracia, la Venus de Milo, etc.

Y mañana he reservado para comer en Au Pied de Cochon. Tengo muy buenas expectativas del sitio así que espero disfrutarlo. Ya lo contaré aquí mismo.