Se ha celebrado la cuarta y última jornada de “Riojano, joven y fresco” correspondiente a este año 2008 con el habitual éxito de público. A pesar de las experiencias previas, no pude acudir a primera hora y llegué a la calle Bretón cuando ésta ya se encontraba abarrotada. Aunque no llegó al extremo de la jornada del 24 de julio, la cantidad de gente era tal que se hacía casi imposible acceder a los puestos, que estaban en muchos momentos totalmente desbordados. Los organizadores quieren conseguir una fiesta del vino, y no cabe duda de que van por buen camino. Ahora bien, no creo que sea el lugar apropiado para conocer, catar, comparar y disfrutar de los vinos. Para eso es mejor ir a Ezcaray.
Como en las tres ocasiones anteriores, los puestos se disponían en dos lugares: la calle Bretón de los Herreros propiamente dicha y la plaza de la calle Portales donde se ubica “Logroño Turismo” y la sede de la Fundación Ibercaja. Aquí se encontraban las bodegas con más “tirón”: AGE (Fuenmayor), Juan Alcorta (Logroño), Ysios (Laguardia) y Domeq (Elciego), todas ellas del grupo Domeq Bodegas. Entre codazos y empujones pudimos obtener una copa de “Azpilicueta” y otra de “Marqués de Villamagna”, ambos crianzas de 2005, con su calidad habitual.
En la calle Bretón se colocaron el resto de bodegas: “Castillo de Mendoza” (San Vicente), “Bodegas Alabanza” (Agoncillo), “Marqués de Campo Nube” (Alfaro), “González Teso” (Labastida), “Bodegas Bilbainas” (Haro), “Bodegas Juan Caminún” (Yécora), “Gerardo Viteri” (Lanciego), “Paternina” (Haro) y “Rioja Vega” (Viana).
De estas pudimos conseguir una copa de tinto y otra de blanco de Rioja Vega y un tinto de "Gontés" (González Teso). No pude averiguar ningún detalle de los vinos. Por la intensidad de color y sabor, todos eran jóvenes, de alta graduación y gusto moderno.
Como en las tres ocasiones anteriores, los puestos se disponían en dos lugares: la calle Bretón de los Herreros propiamente dicha y la plaza de la calle Portales donde se ubica “Logroño Turismo” y la sede de la Fundación Ibercaja. Aquí se encontraban las bodegas con más “tirón”: AGE (Fuenmayor), Juan Alcorta (Logroño), Ysios (Laguardia) y Domeq (Elciego), todas ellas del grupo Domeq Bodegas. Entre codazos y empujones pudimos obtener una copa de “Azpilicueta” y otra de “Marqués de Villamagna”, ambos crianzas de 2005, con su calidad habitual.
En la calle Bretón se colocaron el resto de bodegas: “Castillo de Mendoza” (San Vicente), “Bodegas Alabanza” (Agoncillo), “Marqués de Campo Nube” (Alfaro), “González Teso” (Labastida), “Bodegas Bilbainas” (Haro), “Bodegas Juan Caminún” (Yécora), “Gerardo Viteri” (Lanciego), “Paternina” (Haro) y “Rioja Vega” (Viana).
De estas pudimos conseguir una copa de tinto y otra de blanco de Rioja Vega y un tinto de "Gontés" (González Teso). No pude averiguar ningún detalle de los vinos. Por la intensidad de color y sabor, todos eran jóvenes, de alta graduación y gusto moderno.