Actualmente los tratamientos
fitosanitarios que se aplican en la vid son la clave de las producciones
constantes y de calidad que se obtienen de manera independiente a la posible
influencia climática o patológica adversa sobre la uva. La lucha por un
producto de calidad hacen que una situación con alta humedad relativa, los daños
por granizo, la competencia de malas hierbas o la abundancia de plagas y
enfermedades, requieran tratamientos fitosanitarios que permitan obtener un
producto de calidad y así poder rentabilizar el cultivo. Inevitablemente para
mantener los actuales estándares de calidad de producto es necesario realizar
tratamientos fitosanitarios durante casi todas las épocas del año tanto en el
ciclo vegetativo como durante la época de reposo de la vid (invierno).
Cepa con racimos muy afectados por enfermedades fungicas y perdida de cosecha. Fuente: Entrada del blog epicureos fecha domingo, 9 de octubre de 2011 |
Para garantizar la preservación
de la uva en un estado de calidad óptimo se vienen empleando tratamientos
fitosanitarios básicos en la vid al menos desde hace unos cuantos siglos atrás
o incluso más. Por ejemplo el tratamiento con azufre es histórico y los
tratamientos con sulfato de cobre (caldo bordelés) son del siglo XIX. Hoy en
día todavía se siguen manteniendo estos productos por su bajo coste y alta eficacia.
En general podríamos decir que se pueden emplear: abonos y complementos
minerales, herbicidas, acaricidas, insecticidas, fúngicidas y antibotríticos.
Estableciendo un calendario tipo en
el que se relatan la relación de algunas de las principales plagas o
enfermedades y otros condicionantes que influyen en la elección de los
productos para realizar tratamientos fitosanitarios tendríamos lo siguiente:
Mes
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Patología/Lucha contra
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Tratamiento
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Febrero
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Malas hierbas
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Herbicida
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Marzo
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Polilla del racimo (Lobesia botrana)
Excoriosis (Phomopsis viticola)
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Confusión sexual (Feromonas)
Fungicida
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Abril
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Oidio o ceniza (Uncinula necator )
Piral o sapo
(Sparganothis pilleriana)
Araña amarilla (Eotetranychus carpini)
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Fungicida
Insecticida
Acaricida |
Mayo
|
Mildiu de la vid (Plasmopara viticola)
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Fungicida
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Junio
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Clorosis férrica
Mildiu (Plasmopara viticola)
Oídio o ceniza (Uncinula necator)
Polilla del racimo (Lobesia botrana)
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Enmienda férrica
Fungicida
Fungicida
Confusión sexual o Insecticida
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Julio
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Mildiu (Plasmopara viticola)
Oídio o ceniza (Uncinula necator)
Araña amarilla (Eotetranichus carpini)
Polilla del racimo (Lobesia botrana)
Mosquito verde (Empoasca vitis)
Podredumbre
gris o botrytis (Botrytis cinerea)
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Fungicida
Fungicida
Acaricida
Insecticida
Insecticida
Antibotritico
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Agosto
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Mildiu (Plasmopara viticola)
Oídio o ceniza (Uncinula necator
Polilla del racimo (Lobesia botrana
Mosquito verde (Empoasca vitis)
Podredumbre
gris o botrytis (Botrytis cinerea)
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Fungicida
Fungicida
Insecticida
Insecticida
Antibotrítico.
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Septiembre
|
Ordinariamente en esta época ya
no se realizan tratamientos por la proximidad a vendimia.
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Respecto a las posibles consecuencias
que pueden estar derivadas de la aplicación de productos existe un elemento directo
receptor de los mismos como es la vid (uva) sobre el que se aplica el
producto y sobre el que deben de recaer los controles que eviten que dosis no
aceptables de producto aplicado lleguen a bodega.
No obstante también existen
elementos indirectos de recepción de productos, entre ellos se pueden destacar
al menos: las levaduras, que de forma natural existen en la cutícula de la
baya, otra fauna existente (micro y macro), la atmósfera, las escorrentías de
agua de lluvia, e incluso el viticultor aplicador de los productos.
Existe probabilidad de que el
tratamiento con productos fitosanitarios pueda entrañar riesgos para la salud
humana y para el medioambiente, no obstante existen técnicas de gestión
integral de plagas y otros métodos de control que intentan minimizar la exposición
al riesgo de los productos.
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