Durante nuestro fin de semana en Aranda de Duero, del que ya comentamos nuestra experiencia con el lechazo asado, también aprovechamos para realizar distintas visitas de tipo cultural o gastronómico. Dentro de la segunda categoría entra esta visita a Cerveza Tesela.
Cerveza Tesela es una cervecera artesanal de reciente creación que se ubica a las afureras de Aranda de Duero, en el polígono industrial Allende Duero. Como se ve en su web están abiertos a las visitas, al precio de 6 € por persona.
La visita nos pareció muy interesante y totalmente recomendable, pues es un recorrido completo y detallado por todas las fases de la elaboración de la cerveza partiendo de una breve introducción histórica y terminando con la cata de la cerveza. En singular, pues de momento sólo elaboran la Cerveza Tesela Tostada Roble.
De la introducción histórica es reseñable el hecho de que la romanización de la Península Ibérica supuso la sustitución de la cerveza, bebida de bárbaros, por el vino, que se tenía por la bebida de las personas civilizadas. Lo cierto es que en España casi no se ha elaborado cerveza hasta el siglo XX, aunque hay indicios de que era una bebida bastante común antes de la llegada de los romanos. Es por ello paradójico que el nombre de Tesela elegido para esta cerveza artesana haga referencia a los mosaicos romanos.
La segunda parte de la visita nos lleva a los ingredientes con que elaboran esta cerveza. Fundamental es la malta que combinan con distintos grados de tostado para obtener el resultado deseado. También muy importante es el lúpulo que aportará aromas, sabor y amargor, dependiendo de cómo y cuándo se emplee. Pero lo más llamativo de esta cerveza son las virutas de roble que le dan, además de su nombre, unos agradables toques a madera en aromas y sabor.
Posteriormente nos explican todo el proceso de elaboración. Me parece muy interesante el hecho de que el momento en que se añade el lúpulo puede producir sobre todo amargor, si es en un momento temprano, o aromas y sabor, si se añade más tarde. Aquí personalmente recuerdo algunas cervezas artesanas que hemos probado recientemente y cuyo amargor nos parecía excesivo. No es el caso de esta cerveza.
La cerveza ya elaborada se embotella con un poco de azúcar para que realice una segunda fermentación en la propia botella. Esta segunda fermentación será la fuente del gas que produce la espuma de la cerveza que, por tanto, no necesita del gas añadido de las cervezas industriales. A cambio encontraremos los posos de las levaduras muertas al terminar su labor. Tomar estas levaduras con la cerveza es opcional.
Con las botellas realizando esta segunda fermentación tienen también otras botellas en las que se están elaborando las pruebas para futuras variedades de Cerveza Tesela. Me llama la atención una cerveza de trigo que estaré encantado de probar en cuanto la tengan lista para el público.
Terminamos esta estupenda visita con una cata de la Cerveza Tesela Tostada Roble acompañada de algo de picoteo. Tras las detalladas explicaciones no nos sorprende encontrar una cerveza tostada de abundante y persistente espuma, con cuerpo, sabrosa pero sin excesos de ningún tipo y con un delicado toque a roble. Una delicia.
Visita divertida, entretenida, con muy buen ambiente y además instructiva. Como decía al principio totalmente recomendable. Y lo más importante, la cerveza nos pareció excelente.